El Departament de Salut ens audita els menús regularment. A la darrera revisió que ens van fer a finals d’any ens van suggerir uns petits canvis que ja tenim enllestits. Com sempre, hem donat el menú en paper als nens perquè el pengeu a la nevera amb un imant ( 😉 ) i també el deixem a la web perquè el pugueu consultar sempre que vulgueu. Una vegada més us en recordem que a l’apartat Menjador d’aquesta web hi trobareu un munt d’informació.
Ara sols car fer aquesta petita gran modificació. Tret de la web; https://evidientemente.wordpress.com/2014/09/14/nos-cepillamos-los-dientes-en-el-colegio/
Acaba de comenzar el curso escolar y me consultan varias madres sobre qué pueden hacer, que en sus colegios “no dejan lavarse los dientes a los niños”.
Me sorprende mucho esto. Madres tremendamente concienciadas sobre salud bucodental, principalmente porque tienen niños pequeños que ya han sufrido caries (y sus tratamientos correspondientes, y sobre todo han aprendido con esfuerzo a cepillar correctamente a sus hijos), que asumen y entienden que los hábitos higiénicos deben ser algo rutinario y elemental, y se topan contra un muro.
Parece ser que en algunos colegios es complicadísimo que los nenes se cepillen los dientes. Está claro que hablamos de niños que NO saben cepillarse solos, son pequeñitos y apenas saben agarrar el cepillo y mordisquearlo. Pero han interiorizado ya el hábito de que después de comer hay que lavarse los dientes, de la misma manera que después de ir a hacer caca se limpian el culillo.
Pues no. Tenemos excusas para todos los gustos: que si se intercambian los cepillos y eso es muy peligroso (en este caso me lo dice una madre con niña de 6 años, que ya es una edad como para no hacer estas cosas), que si no tenemos un sitio para poder cepillarse (pues como se entere la Consejería de Sanidad de que no tienen lugar para este tipo de prácticas…), que si con dos veces al día ya es suficiente y que lo hagan en casa…
Lamentablemente en España el 40% de los niños de 0 a 5 años tienen caries. Eso quiere decir que en una clase de 25 críos, 10 tienen caries. Y el que tiene caries raro es que tenga una sola. La caries es una enfermedad multifactorial que se puede prevenir tomando una serie de precauciones, que son cepillarse CORRECTAMENTE después de las comidas y reducir el consumo de azúcares, sobre todo entre horas. Y por supuesto acudir a revisión con el dentista desde que sale el primer diente o como muy tarde antes del primer año. Revisemos los hábitos en España y nos cuadrarán las cifras.
Por otra parte conozco otras madres en cuyos colegios el cepillo y la pasta de dientes forman parte del material escolar normal, y lo usan; guarderías en las que con un muñeco y un cepillo gigante enseñan a los niños a cepillarse los dientes y repasan de vez en cuando.
Está claro que este tema depende directamente de la motivación que tenga la persona que está a cargo de los niños.
Sucede igual en cualquier institución, ya sea de ancianos, de discapacitados, hospitales, da lo mismo. Si el personal no está motivado, la higiene dental pasa a un segundo o tercer plano sin importar para nada la patología o las necesidades que la persona pueda tener, incluso aunque una mala higiene sea decisiva en su salud general (UCIs, trasplantados…).
Yo, que soy de la opinión de que el personal sanitario primero debe hacer educación sanitaria y luego todo lo demás, creo que es muy interesante que padres y dentistas propongamos a los colegios trabajar juntos. Dar charlas, talleres, hacer juegos, “excursiones” a clínicas, ir los dentistas a contar cómo es nuestro trabajo a los niños. En general los colegios y guarderías están encantados de realizar actividades de este tipo porque es cuando los niños aprenden de verdad, cuando van a ver la estación de bomberos, o la granja-escuela o cuando cultivan sus plantitas. Cuando diseñan menús, cocinan, seleccionan alimentos y los manipulan. Hasta el más desmotivado de los profesores brilla cuando ve a sus alumnos ilusionados con alguna actividad así.
Vamos a demostrar una vez más que el movimiento se demuestra andando: enseñar hábitos de salud no es escribir 20 veces “hay que lavarse los dientes después de cada comida”.